El Chasque 163
8/11/2024
En el anterior Chasque recordábamos como había surgido, tras la derrota del FA de octubre de 2019, que desnudara debilidades y por la remontada de Noviembre que abriera una esperanza y la conciencia de que era necesaria una mirada autocrítica sobre los 15 años de gobierno.
Entendíamos la necesidad de una organización, un espacio, un movimiento en el FA. Acuerdos básicos de sectores, grupos, personas, capaces de acordar algunos puntos e intentar superar debilidades e insuficiencias.
Existía y existe la necesidad de construir un FA que encabece el proceso de cambios.
Intentamos, a través de El Chasque y con un conjunto de compañeros, forjar un espacio de debate sobre esa necesidad, entendiendo que la comunicación debe ser una herramienta para la toma de conciencia y la organización .
También hubo algunos movimientos en torno a Carolina Cosse, a partir del agrupamiento de Socialistas, Comunistas y otros sectores que ganaron la Intendencia de Montevideo en 2020, que después se diluyó. No hubo acción común, ni visión de futuro para construir un espacio político potente con lineamientos claros sobre la necesidad de superar el capitalismo. NO ya, hoy, sino abrir un camino que comience por enfrentar al gran capital, a la oligarquía, que genere conciencia que con éstos no hay consensos ni política de Estado, sólo ven por sus intereses.
El propio FA encaró un proceso de autocrítica, pero no lo tomó tan en serio como merecía la situación y se ha reiterado los mismos errores. Lo que fue muy claro en las elecciones departamentales y municipales de 2020, donde en muchos lugares primó el espíritu estrecho de algunos sectores por sobre la militancia local. Errores y falencias que tampoco han sido corregidos en el proceso de la actual campaña electoral, según nuestra opinión.
Volviendo a El Chasque
Pensamos esta publicación virtual como un elemento más, la parte de un todo que sería la necesaria actividad organizada de las clases subalternas para incidir en la realidad. No nos atrae la simple existencia como espectadores o relatores de las luchas de otros.
Atreverse a pensar nuevas formas de organización social, en la economía, en la comunidad, que impliquen el desplazamiento de los grandes capitales, que gracias a su poder, impones sus ideas en la sociedad y los gobiernos, incidiendo y determinando en última instancia, el destino de cada uno de nosotros, cosa que las más de las veces pasa desapercibido.
No creemos en los esfuerzos individuales ni en el espontaneísmo, la sociedad necesita de la rebeldía organizada para avanzar hacia su objetivo de una real emancipación popular.
Sólo las masas, sólo por, para y con el pueblo habrá cambios permanentes. Con su protagonismo y participación en la toma de las decisiones importantes, estratégicas.
Por tanto, queremos hacer una pausa en la publicación semanal.
La expectativa es que más compañeros puedan sumarse a este debate que consideramos imprescindible, que no puede quedar en monólogo.
Si la idea sigue siendo válida, que necesitamos una estrategia, un programa, comunicación, organización, para un FA que cumpla su misión histórica. No es una tarea que puedan encarar una, dos o tres personas.
El 24 de noviembre se decide, si la derecha renueva su supremacía, lo que será un duro golpe para los sectores populares. O si una nueva avalancha de pueblo lleva al Frente Amplio al gobierno. En este caso será necesario encontrar los caminos para “cumplir el proceso revolucionario” que reclamara Seregni.
En Diciembre de 2019 decíamos, lo reiteramos en El Chasque 162 y lo repetimos hoy:
“La batalla ideológica, política y económica es un imperativo del momento. Invitamos a participar y aportar al debate que se debe la Izquierda.
…con la certeza que el capitalismo no es una salida para la humanidad.
..los cambios sólo son posibles con la participación protagónica de trabajadores y pueblo…”
Como nos reclamara el General Seregni:
“La razón de ser, el porqué y para qué de nuestro Frente Amplio, está en realizar una tarea histórica, fundamental; cumplir el proceso revolucionario en nuestro país. En transformar las viejas estructuras económicas, políticas y sociales de nuestro país hoy caducas….» (Primer Congreso de Comités de Base en diciembre de 1971
