Gonzalo Alsina
El Chasque 170
17/01/2025
Según el especialista en geopolítica uruguayo Joselo Olascuaga, en charla de fin de año de 2024, cerrando el año en la Fundación Arismendi, los BRICS+ tienen seis características fundamentales, a saber:
1-Es un bloque alternativo a la globalización unipolar imperialista, es decir, es antiimperialista y propone un mundo multipolar.
2–Propone un nuevo orden mundial, una nueva política económica global a través de distintos tratado y acuerdos entre países.
3-Es un bloque donde conviven pluralidad de culturas y civilizaciones diferentes, muchas de ellas milenarias, como: persas, árabes, rusos, indues y chinos…
4-Siguiendo la tradición de la Conferencia de Bandung de 1955, se caracteriza por la no alineación.
5–Procura encontrar una pacificación monetaria y busca alternativas al dólar de USA que es usado como un arma de guerra.
6– Entre sus principios fundamentales están la defensa de la soberanía y autodeterminación de los pueblos y países.
Hemos elegido empezar a analizar la primera característica y el país será la RPCH, por ser uno de los impulsores del Bloque y por ser una de las primeras potencias mundiales, que el imperialismo estadounidense tiene en la mira del punto de vista estratégico.
La Constitución de la República Popular China aprobada el 4 de diciembre de 1982, en su preámbulo, expresa que:
“China es uno de los países de más larga historia del mundo. Las diversas nacionalidades del pueblo chino han creado conjuntamente una brillante cultura y poseen una gloriosa tradición revolucionaria.
En el siglo XX ha experimentado grandes cambios históricos que estremecieron al mundo. La Revolución de 1911, dirigida por el Dr. Sun Yat-Sen abolió el régimen imperial feudal e hizo posible la creación de la República China; sin embargo, aún quedaba por cumplir la misión histórica de la lucha del pueblo chino contra el imperialismo y el feudalismo.
En 1949, el pueblo chino de las diversas nacionalidades, dirigido por el Partido Comunista de China con el Presidente Mao Zedong como líder –después de una prolongada, ardua y sinuosa lucha armada, además de otras formas de lucha- terminó por derrocar la dominación del imperialismo, del feudalismo y del capitalismo burocrático, coronó con una gran victoria la revolución de nueva democracia y proclamó la República Popular de China. Desde entonces, el pueblo chino ha tomado el poder estatal en su manos y se ha erigido en dueño del país.”
La larga tradición antiimperialista se remonta al siglo XIX, a las guerras del opio, donde China fue humillada, donde las fuerzas militares británicas se dedicaron al saqueo, pillaje y asesinatos masivos. Las potencias occidentales –Gran Bretaña, USA y Francia- obligaron a firmar a China, tratados humillantes.
En los más de sesenta años que transcurrieron entre la Primera Guerra del Opio hasta el derrocamiento de la monarquía en 1911, China fue humillada continuamente por las potencias invasoras. Las potencias invasoras se apropiaron de territorios chinos, Gran Bretaña ocupó Hong Kong y convirtieron a través de concesiones diversas, transformar al país, en una zona bajo dominio económico de las potencias occidentales.
Con esto, el camino para un desarrollo autónomo de China quedó cancelado, al integrarse al sistema capitalista mundial, como un país dependiente convertido en una semicolonia.
La situación vivida tras la revolución de los Taiping entre 1851 y 1864, las guerras de opio entre 1840 y 1860, y todas las consecuencias que trajo la intervención de las potencias occidentales y desde 1899 a 1900 el movimiento Yo He Tuan que organizó una rebelión patriótica de campesinos contra la intervención imperialista, fueron expresión de la decadencia de la monarquía y de la sociedad feudal y neocolonial en la China, que clausuraba el siglo XIX y emergía el XX.
En este proceso se inserta la burguesía bajo el liderazgo de Sun Yat Sen que unifica las fuerzas contra la monarquía y conforma la Liga Revolucionaria de China que tenía tres principios: nacionalismo, democracia y bienestar del pueblo. Se produjeron distintos levantamientos para eliminar los impuestos al arroz, por la recuperación del ferrocarril y control de las minas, que fueron bestialmente reprimidos con muertos y heridos.
El 10 de octubre de 1911 Xiong Bingkun jefe de un batallón de ingenieros estacionado en Wuchang dio inicio al levantamiento final que derribó la monarquía. Las tropas realizaron una rápida ofensiva por distintos lugares de China y se declaró independiente la provincia de Hubei. Se formó un Gobierno provisional de la República China, con un gobierno republicano. Sun Yat Sen volvió del exilio a fines de 1911 y el 1º de enero de 1912 juró su cargo e instauró un gobierno provisional y una constitución.
El 12 de febrero de 1912 el emperador –último de ellos- abdicó al trono, culminando la revolución de 1911 que terminó con 200 años de la dinastía Qing y más de 2000 años de monarquías, e instalando un sistema republicano democrático.
En los hechos el que controlaba el poder era el jefe militar Yuan Shikai que había estado en el gobierno imperial. Para mantener la unidad Sun Yat Sen se retiró del cargo y Yuan asumió el cargo de presidente. Sun y otros líderes crearon el Partido Nacionalista Chino (Kuomintang) que ganó las elecciones en 1913. Yuan dio un golpe de Estado disolviendo el parlamento e ilegalizó al Kuomintang e hizo aprobar una nueva Constitución en 1914. En los hechos fue un gobierno dictatorial con intenciones monárquicas., lo que se concretó en 1915 cuando Yuan se hizo proclamar emperador. Propuso un plebiscito para volver al imperio. Occidente reconoció a Yuan a cambio de la entrega de concesiones para sacar petróleo y el control de las finanzas por empresas extranjeras. De nuevo hubo rebeliones militares y campesinas que obligaron a renunciar al autoproclamado emperador.
Los señores de la guerra –grandes terratenientes y comerciantes- formaron ejércitos con apoyo de países occidentales, tomando el poder y gobernando desde Beijing.
Sun retornó al poder en 1918 en medio de la división y el descontrol, pero el poder estaba divido entre el norte y el sur. China entró a la 1ª G.M apoyando la Entente pero fueron los negociadores chinos despreciados por las potencias vencedoras en la guerra y con el apoyo de EE.UU, Japón se quedó con partes estratégicas de territorios chinos. Esto generó un movimiento nacionalista que se apoyó mucho en el movimiento, la Nueva Cultura, y en los jóvenes y trabajadores de las ciudades más grandes.
El 4 de mayo de 1919, se generó un movimiento patriótico que realizó un gran acto en Beijing en defensa de la soberanía nacional y contra el gobierno de turno en el poder, que con una tremenda represión a los estudiantes -muchos fueron arrestados-, derivó en una gran movimiento huelguístico de trabajadores de la capital y en el resto del país, que encabezaron la protesta.
El gobierno tuvo que liberar a los estudiantes y éstos fortalecidos en alianza con los obreros desarrollaron el Movimiento Nueva Cultural. Conduciendo este movimiento estaban Li Dazhao y Chen Duxiu –luego fundadores del PCCH- que influidos por la revolución rusa introdujeron y difundieron las ideas de Marx y Lenin.
Sun perseguido se exilió en Japón donde se contactó con la Internacional Comunista que le dio su apoyo, fundada en ese año 1919.
En agosto de 1920 se creó el primer grupo comunista en Shanghái, que fue rápidamente replicado en las principales ciudades. El 23 de julio de 1921 el PCCH celebró en la clandestinidad su primer Congreso Nacional en una barca en el lago Nanhu en la provincia de Zhejiang.
De esas tradiciones antimperialistas vienen los fundadores del Partico Comunista de China, entre ellos los jóvenes Mao Zedong –en alfabeto pinyin- o Mao Tse-Tung como se dice en occidente, y Zhou Enlai, entre otros.
