El Chasque
23/01/2025
Elementos a analizar de cara al proceso de elaboración del plan de acción 2025-2026
Introducción
La victoria electoral del pasado 24 de noviembre inaugura una nueva etapa del país. Los aprendizajes desarrollados por la fuerza política durante el proceso de autocrítica y el cumplimiento del plan político, nos ponen de cara a nuevos desafíos.
Somos plenamente conscientes de la enorme esperanza con la que buena parte de la ciudadanía espera la asunción del presidente Yamandú Orsi y el equipo de gobierno conformado.
El nuevo gobierno tendrá sobre sus espaldas la concreción de cambios que posibiliten al país superar el estancamiento y abordar, en el marco de grandes acuerdos sociales, soluciones de fondo a los grandes temas que vivimos las uruguayas y uruguayos. Este enorme desafío nos obliga a actuar con enorme responsabilidad de cara al cumplimiento de nuestro programa de transformaciones.
Es en ese contexto que, enmarcados en el documento de relacionamiento “»FUERZA POLÍTICA, GOBIERNO, TRABAJADORES Y ORGANIZACIONES SOCIALES», aprobado por el Plenario Nacional el 19.04.04. y ratificado en el año 2021 por el Congreso “50 años de unidad”, es necesario analizar el rol del Frente Amplio en la etapa que se avecina
Nuestra fuerza política deberá abordar un proceso de fortalecimiento que posibilite ensanchar los acuerdos sociales en torno a nuestro programa de transformaciones para el país, en un proceso de amplia participación de nuestra militancia, de profundización de los vínculos con las organizaciones sociales y sindicales y de escucha activa hacia el conjunto de la sociedad a lo largo y ancho de todo el territorio nacional.
Para esto es imprescindible profundizar a todos los niveles la unidad de nuestra fuerza política. Tanto la unidad interna como la unidad del Frente Amplio con el conjunto de organizaciones sociales que componen el bloque político y social de los cambios.
Los cambios en la sociedad y los desafíos de la fuerza política
Atravesamos una etapa de transformaciones profundas en la sociedad. Tal como planteamos en el último ciclo electoral, la disputa entre dos proyectos de país se enmarca en profundas transformaciones culturales, productivas y sociales.
Los problemas ambientales, la profundización de las desigualdades y el surgimiento de un movimiento de extrema derecha a nivel global requieren una caracterización rigurosa del tipo de sociedad en el que se desarrolla nuestra acción política, tanto a nivel nacional como internacional.
A tales efectos, tanto en su confección como en su implementación, el plan político deberá integrar herramientas de investigación que permitan profundizar los diagnósticos sobre las resoluciones políticas que adoptamos.
Los ejes principales del plan
La fuerza política tiene como desafío principal de la etapa que se inaugura el 1° de marzo la defensa y el acompañamiento al gobierno popular. Esto supone un proceso participativo de articulación con los diversos actores de la sociedad, a los efectos de construir amplios acuerdos con el programa de nuestra fuerza política.
Esto supone un fuerte desarrollo de la actividad política del Frente Amplio a nivel de todo el territorio nacional, profundizando la descentralización y atendiendo a la diversidad del país.
Durante el primer semestre del plan de acción en construcción será fundamental el trabajo de cara a la conquista de la mayor cantidad de gobiernos departamentales y municipales, que se dirimirán en las elecciones de mayo. 148 elecciones simultáneas que cierran el ciclo electoral que posibilitó la vuelta de nuestra fuerza política al gobierno nacional.
Los resultados de las elecciones de octubre y noviembre, síntesis de un proceso de fortalecimiento nacional de la fuerza política y el proyecto de cambios, nos permiten mirar con optimismo el desafío de mayo. A tales efectos es fundamental fortalecer los mecanismos de coordinación de toda la fuerza política a nivel nacional para dar continuidad al buen trabajo realizado.
Sin embrago, tal como plantea el documento de relacionamiento y como hemos valorado en todo el proceso de autocrítica, los desafíos de la fuerza política no se agotan en el vínculo con el gobierno, ni mucho menos en las importantes contiendas electorales que tenemos por delante. La fuerza política necesita un proceso profundo de fortalecimiento que dé continuidad al plan desarrollado en el último quinquenio.
Para esto es necesario a partir de julio del 2025, una vez configurado el escenario político nacional, iniciar un proceso de estudio y debate político sobre la fuerza política que somos y la que necesitamos ser, para iniciar un proceso de transformaciones política que no se agote en cinco años.
Asimismo, es necesario desplegar la discusión política que acompañe la agenda de transformaciones, al tiempo que se inicia un proceso de investigación profunda sobre la situación actual del Frente Amplio, su vinculo con el conjunto de la sociedad uruguaya, la relación de los principios y valores que estructuran el proyecto político con los que predominan en el conjunto de la sociedad.
Necesitamos una fuerza política que revitalice su militancia, que dinamice la vida de los comités de base y desarrolle formas de participación que permitan involucrar en sus debates a los más amplios contingentes de pueblo. Para esto es necesario construir una percepción compartida sobre la situación actual y una estrategia de largo plazo de desarrollo de la fuerza política.
El Congreso Ordinario a desarrollarse en el 2026 debe sintetizar todo el proceso de elaboración, discusión y acción política que nos posicione ante el conjunto de la sociedad uruguaya en mejores condiciones para llevar adelante el ciclo de transformaciones que iniciamos con la victoria electoral.
20 de enero de 2025
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2004 FRENTE AMPLIO: FUERZA POLÍTICA, GOBIERNO, TRABAJADORES Y ORGANIZACIONES SOCIALES
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