Nos escribe Carlos Borelli
El Chasque
17/12/2024
La narrativa que creó exitosamente Luis acerca de su liderazgo mundial exitoso de la pandemia y de su manejo de la sequía que ameritó que la declarara emergencia nacional para la ganadería 6 meses antes de tomar la primera medida para la zona metropolitana no tiene sustento en los hechos históricos que fueron precisamente de signo contrario.
Durante la pandemia -luego de un primer año en el que zafamos («y si zafamos es porque zafamos» Luis dixit literal)-, a principios del segundo año el GACH le advirtió que a la luz de la evolución de los contagios y de la mutación del virus era indispensable «blindar Abril».
No sólo no lo hizo, sino que actuó en lo contrario, denostando al FA que quería seguir las instrucciones del GACH y detener la actividad durante 2 semanas. Luis dijo que el FA quería detener la economía y tuvo éxito en su relato.
A continuación en el tercer y cuarto trimestres de ese año, el Uruguay lideró las estadísticas mundiales de mortalidad por COVID, teniendo medio centenar de muertos por día y acumulando 4000 en ese semestre.
Con respecto a la sequía… las vaquitas sufrieron algo ese año y se recuperaron espectacularmente al año siguiente en el que batieron todos los records de exportaciones del rubro. Sin embargo, no hubo derrame y los salarios y jubilaciones siguieron estando por debajo de 2019.
A pesar de ello, la conflictividad sindical fue muchísimo menor que durante el gobierno de Mujica. Y los resultados de las previsiones de Luis: «No zafamos». La zona metropolitana tomó agua no potable, al punto de que se tuvo que quitar transitoriamente el IVA para el agua embotellada.
Si me he tomado el trabajo de recordar estos hechos históricos -constatables releyendo la prensa y la documentación oficial de la época- es simplemente porque, a pesar de que el pueblo uruguayo ya le ganó a la CM por 100.000 votos, aún queda Luis hasta Marzo que ha resuelto redoblar sus mentiras.
No está bien mentir para auto deificarse. Y no está bien manipular de esa forma la opinión pública. Luis tiene todas sus cartas para intentar volver en las próximas elecciones nacionales.
Creo que es indispensable decir simplemente la verdad de lo ocurrido y de su trayectoria. No sirve de nada insultarlo. Simplemente con decir la verdad alcanza.
Todo esto sin anclarse en mirar al derrotado. No sea cosa que se opaque el inicio de un segundo largo período de gobiernos progresistas que vuelvan a traer prosperidad ininterrumpida al 95% de los uruguayos que fueron relegados durante el lustro que termina.
