El juego de los espejos. Consejos de Salarios y la OPP

Rosana Porteiro
El Chasque
10/11/2025

La Federación de Funcionarios Públicos No Estatales (FFIPuNE), sindicato que integra el PIT-CNT, hizo público recientemente su rechazo a la conducción de la actual ronda de Consejos de Salarios por parte de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), dependencia de la Presidencia de la República, encargada de asesorar al Poder Ejecutivo en la formulación de los planes, programas y políticas nacionales y departamentales así como también en la definición de la estrategia económica y social del Gobierno.

FFIPuNE señala que la OPP «vació de contenido la mesa de negociación deslegitimando este espacio tripartito y convirtiéndolo en una formalidad al negarse a discutir la plataforma no salarial de la Federación» y derivarla al ámbito del «Diálogo Social». Entiende que trasladar el tratamiento de los beneficios no salariales a ámbitos totalmente genéricos, sin plazos ni metodologías estipuladas y sobre todo sin un plan de ejecución de los resultados de estas acciones, los deja sin garantías y con muchísimas dudas en cuanto al impacto real que tendrá esto en el colectivo. «Si no se dialoga y negocia en los propios Consejos de Salarios (órganos tripartitos integrados por representantes del Poder Ejecutivo, y de las organizaciones más representativas de trabajadores y de empleadores), los cuales fueron creados para eso, qué podemos esperar del formalismo de Diálogo Social», cuestionan.  

Otras de las condicionantes de esta negociación que generaron el rechazo de FFIPuNE fueron que el gobierno la dilata y minimiza, desvaloriza las propuestas sindicales y plantea una total falta de transparencia (la OPP comunicó pautas salariales que no fueron publicadas oficialmente ni cuentan con documentación que la respalde). La Federación señala que «este ocultamiento deliberado tiene consecuencias directas» ya que al no estar disponibles públicamente los lineamientos, las reglas cambian de forma unilateral y la parte trabajadora entra a la negociación sin acceso equitativo a la información. «A esto se suma que la OPP no ha presentado propuestas propias, manteniendo bajo reserva sus posiciones reales, lo que refuerza la opacidad del proceso», resalta. (NOTA)

Pero, ¿de dónde surge este accionar de la OPP? ¿Es una actitud aislada de su director Rodrigo Arim? Creemos que no, sino que la clase empresarial está empujando cambios en el funcionamiento de los Consejos de Salarios en su beneficio y encuentra eco por superposición de intereses o complicidad en actores políticos de la oposición pero también del actual gobierno.

No parece ser casualidad que el 28 de octubre, en la sala de conferencias del Radisson Victoria Plaza, la Universidad de la Empresa (UDE) realizara una mesa redonda titulada «Repensando la negociación colectiva para el siglo XXI». El encuentro aunque se presentó como «una reflexión plural sobre el futuro del modelo tripartito uruguayo», y contó con la participación de Milton Castellano, director del Instituto Cuesta Duarte del PIT-CNT, estuvo encabezado por el ex ministro de Trabajo y actual director del Instituto de Relaciones Laborales de la UDE, Pablo Mieres y con las ponencias del ministro de Economía y Finanzas, Gabriel Oddone, el presidente de la Cámara de Comercio, Julio Lestido y Matías Pérez del Castillo, de la firma Pérez del Castillo y asociados, estudio que presta servicios legales, notariales y contables a empresas nacionales y extranjeras que operan en el Uruguay.

En la mesa redonda Oddone planteó que Uruguay «necesita niveles de flexibilidad» y consideró imprescindible «establecer negociaciones sobre evidencia y no sobre aspectos que tienen que ver con elementos estrictamente jurídicos”. Cuándo un ministro de economía, que se ha manifestado a favor de la reforma jubilatoria que extiende la edad de retiro a los 65 años y baja el monto de las jubilaciones, de desindexar salarios (desvincular los ajustes salariales de la inflación), y que según publicó recientemente la Junta de Transparencia (JUTEP) cuenta con un patrimonio de 1, 8 millones de dólares (3,9 millones de dólares si se suma al suyo, el de su esposa), dice que hay que aplicar mayor flexibilidad en los Consejos de Salarios, no es difícil imaginar quién pagará estos cambios que insinúa.

La flexibilidad que plantea el ministro no se refiere a otra cosa que a la legislación que rige a los Consejos de Salarios. Estos fueron creados por la Ley N° 10.449 del año 1943. Funcionan a nivel de rama o por grupos de actividad, en ámbitos obligatorios que se dan de forma paralela o acumulativa a la negociación colectiva bipartita de rama. Tienen una serie de competencias privativas de las cuales cinco son las más importantes, tres de ellas fueron previstas en la ley de 1943: clasificar por profesiones y categorías a los trabajadores de cada grupo de actividad, fijar el salario mínimo de cada una de esas categorías, y actuar como órganos de conciliación en los conflictos colectivos que se generan entre empresas y trabajadores del grupo. 

A partir del 2009, la Ley N° 18.566 incluyó dos competencias, que si bien a veces eran incluidas voluntariamente por los actores sociales en cada Consejo, a partir de la ley pasaron a ser obligatorias: el ajuste de los salarios y la regulación de «otras condiciones de trabajo» (en tanto sean acordadas por los actores sociales). La flexibilización laboral sugerida por Oddone en la mesa redonda, podría implicar la ya mencionada desindexación salarial, y la no regulación de condiciones de trabajo en este ámbito tripartito. Precisamente este fue el tema que el director de la OPP pasó al diálogo social, desmereciendo la obligatoriedad constitucional de que se trate en el ámbito de los Consejos de Salarios.

En la mesa redonda, Pérez del Castillo propuso que en la negociación colectiva uruguaya se mantengan las instancias tripartitas pero se modifiquen las dos últimas competencias mencionadas y que los Consejos de Salarios vuelvan a tener las que existían hasta el año 2009, o sea la no obligatoriedad de la negociación colectiva en estos dos puntos. Fundamentó su propuesta en el argumento de que «las condiciones de trabajo (ajustes salariales y otros beneficios) que se pactan en los Consejos no siempre cuidan el mantenimiento de las tasas de empleo». El argumento claramente plantea que el peso de cuidar el mantenimiento de las tasas de empleo recae exclusivamente en los trabajadores.

Esta visión, que se hizo visible también por el accionar de Arim al pasar el tratamiento de las condiciones laborales no salariales a un ámbito totalmente informal y sin reglas claras como el Diálogo social y por Oddone, que habló en el evento de darle mayor flexibilidad a la negociación, es rechazada no solo por los trabajadores sino también por Milton Castellano, director del Instituto Cuesta Duarte del PIT-CNT, presente el evento. Castellano defendió el papel distributivo de la negociación colectiva y sostuvo que «el salario es un agente de distribución. Es impensable que el país crezca si no hay una distribución más equitativa». Además, rechazó la idea de volver a un sistema de negociación «libre y voluntario», al entender que «sin reglas no existe negociación posible».

Estos ataques desde un gobierno frenteamplista a principios de la izquierda tan preciados para su militancia, como la igualdad social y los derechos laborales, hacen que nos sintamos como dentro del juego de los espejos, donde nada parece ser lo que es o lo que debería ser.

La Federación de Funcionarios Públicos No Estatales -FFIPuNE– está integrada por asociaciones que funcionan de un modo autónomo y, a la vez, federativo: Asociación de Funcionarios del LATU (AFUL);
Sindicato Ceibal;
Sindicato de Trabajadores del Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (SINEFOP);
Federación de Funcionarios del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA);
Asociación de Empleados de Impresiones y Publicaciones Oficiales (AEIMPO); Asociación de Funcionarios del Instituto Nacional de Carne (AFINAC);
Asociación de Funcionarios de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (AFUANII);
Asociación de Funcionarios de Uruguay XXI (AFUXXI);
Asociación de Funcionarios del Instituto Nacional del Cooperativismo (AFINACOOP); Asociación de Funcionarios de la Agencia Nacional de Desarrollo (AFUANDE); Asociación de Funcionarios del Instituto Nacional de Vitivinicultura (AFINAVI); Asociación de Funcionarios del Instituto Nacional de Evaluación Educativa de Uruguay (AFINEED);
Asociación de Funcionarios de la Comisión Honoraria de Lucha Contra el Cáncer (AFU – CHLCC);
Asociación de Funcionarios del Centro Uruguayo de Imagenología Molecular (AFCUDIM);
Asociación de Funcionarios de MEVIR (AFUME);
Asociación de Funcionarios del Instituto Plan Agropecuario (AFIPA);
Asociación de Funcionarios del Instituto de Regulación y Control del Cannabis (AFIRCCA);
Asociación de Funcionarios de la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (AFUAM), Asociación de Funcionarios del Instituto Nacional de Logística (AFINALOG).

******
https://www.pitcnt.uy/novedades/ffipune-cambiaron-las-reglas-de-juego-de-forma-unilateral

Deja un comentario