9/07/2021
Después de las firmas,797.261, todo va a ser distinto, hay una nueva realidad.
El gobierno de la derecha, de multicolor a gris, al servicio del gran capital ha sufrido un duro golpe de pueblo.
Desde sus planes de rebaja salarial, la rendición de cuentas para reducir gastos, la reforma de la seguridad social que también le pasa factura a los sectores populares, todo ello y más buscando la recomposición de la tasa de ganancia para el Gran Capital. Todo cambia, ahora todo les va a costar más, mucho más, imponer su mayoría de un día en base promesas.
Pensar que sumando poco mas de 400,000 votos se podrán derogar los 135 artículos de la LUC, deja al movimiento popular en las mejores condiciones, seguir acumulando fuerzas para enfrentar la embestida de la reacción que se cree mandatada para hacer lo que quiera.
Dijeron que iban a bajar los costos del Estado, 900 millones de dólares, que los gobiernos anteriores dilapidaban, para que el país pudiera crecer y repartir el fruto de esa buena gestión, pero nunca explicaron cómo lo iban a lograr.
Aunque para muchos estaba claro la única opción que tenían, unos cuantos orientales fueron engañados en su buena fe, creyeron posible que los grandes capitales, terratenientes, multinacionales cederían en su afán de lucro y ganancias.
Apenas comenzada la crisis sanitaria del covid-19, quedó claro, el presidente Lacalle Pou declaró a los «malla oro» como intocables, pues eran los que salvarían al país, pondrían sus motores en marcha apenas pasara lo peor de la crisis y para esto recibió todo el apoyo de la coalición gobernante, Blancos, Colorados, Cabildo Abierto, Partido Independiente. A no hacerse los distraídos en los próximos tiempos diciendo, «yo no fui».
Poco más de un año después, está quedando muy claro, negro sobre blanco, hicieron lo que pensaron, de la única forma posible (lo que si ocultaron), rebajando salarios, subsidiando al capital vía más exoneraciones de impuestos, rebajando jubilaciones, bajando los costos del Estado con menos prestaciones sociales. Lo expresó la Ministra de Economía, se gastó por la pandemia, pero se ahorró de acuerdo a lo planeado en Salud, Cuidados, Educación, transferencias a través del Mides cuando fueron más necesarias, Vivienda, etc.
(Notemos que mientras el Estado gastó más, aumentando las exoneraciones de impuestos al Capital, ahorró rebajando el apoyo a los sectores más necesitados de la población. Con más desocupación, mas de 100,000 por debajo de la pobreza en 2020, llegando a 400,000.)
Estos señores piensan que los votos de un día les dan vía libre para hacer y deshacer, pero hoy aprenden de golpe que no es tan así (800,000 firmas lo dicen). Más aún, cuando ganaron una elección mintiendo u ocultando lo que realmente iban a hacer en el gobierno. Debemos hacer notar con claridad, que pierden su legitimidad cuando no cumplen el programa de gobierno con el cual vencieron en las urnas.
No es que una mayoría sirva y otras no, es la demagogia y el engaño lo que quita representatividad a una colectividad política o de cualquier tipo. Y los representados tienen todo el derecho a rebelarse. No vale, como expresan algunos oficialistas, o el propio Presidente, ganamos, yo me hago cargo. Si que se va a hacer cargo, es responsable, pero no tiene el derecho de cambiar el libreto, por el cual ocupa ese lugar. Lo mismo para cualquiera de los representantes electos por el pueblo.
Con mucha razón se planteaban los Comuneros en París la necesidad de la elección y la posibilidad de remover a quienes no cumplieran con sus mandatos, o en este caso con las promesas de la campaña electoral. No designamos un Rey por 5 años, es nuestro representante, sujeto a rendir cuentas por el ejercicio de su función.
El pueblo avanza y no se rinde, como no se rindió otro 9 de julio, en 1973 cuando salió a la calle a decirle a los dictadores de turno que es la patria de Artigas, que no es posible doblegar a los orientales, que como el General, peleará «con perros cimarrones» por su libertad.
Como en 1973, bajo distinta forma, la oligarquía ligada a los imperialistas, los «malos europeos y peores americanos», pretenden avasallar al pueblo, dejarlo inerme para desvalijarlo.
Y no olvidemos que los únicos cambios posibles son con el pueblo como protagonista, cosa que el Frente Amplio relegó en los últimos años, también cometieron el mismo error varios de los procesos progresistas en América Latina.
Hay que cambiar a una dirección verdaderamente colectiva donde el Plenario Nacional del FA, como mandan sus estatutos, sea quien dirija llevando los debates hasta el último rincón del país. Incorporando a los movimientos sociales, la Comunidad, donde cada Comité de Base esté al frente de las luchas, no para relegar sino para integrar a todos al proceso de liberación nacional y social.
Como en la Patria Vieja, como en 1973, entonemos:
A redoblar, a redoblar
A redoblar, a redoblar
A redoblar muchachos que la noche
Nos presta sus camiones
Y en su espalda de balcones
Y zaguán, nos esperan
Nos esperan otros redoblantes
Otra voz…, harta de sentir…
La mordedura del dolor
A redoblar muchachos la esperanza
Que su latido insista en nuestra sangre
Para que ésta nunca olvide… su rumbo
Porque el corazón… no quiere
Entonar más retiradas
Porque el corazón… no quiere
Entonar más retiradas
El Chasque 
Muy de acuerdo con el análisis Pertenezco a la coordinadora E y en estas instancias de las firmas encontramos un FA araves de los comités con muchas carencias de participación de todas maneras muchos compañeros del FA no sectorizados se integraron y dieron un empujón a la campaña Me preguntó cómo se puede pesar en la interna y plantear un proyecto de izquierda cuando vemos un FA desilachado, pero ya se escuchan voces que llevan agua a su Molino diciendo la gran capacidad de las bases del FA, pero cuando estábamos gobernando se olvidaron de estas bases Alguien tendrá que recoger el guante y cambiar el rumbo Abrazo
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