Sólo con la mujer proletaria triunfará el socialismo

Clara Zetkin.
Discurso pronunciado en el Congreso de Gotha del Partido Socialdemócrata de Alemania el 16 de octubre de 1896. Reproducido como panfleto.

El Chasque 128
8/03/2024

Los estudios de Bachofen[1], Morgan[2] y otros parecen demostrar que la opresión social de la mujer coincide con la aparición de la propiedad privada. La contradicción, en el seno de la familia, entre el hombre en cuanto a poseedor y la mujer en cuanto a no-poseedora constituye la base de la dependencia económica y de la situación social de defraudación de los derechos del sexo femenino. Según Engels, en esta última situación radica una de las primeras y más antiguas formas de dominio clasista. Engels afirma que: «En la familia el marido es el burgués y la mujer representa el proletariado.»[3] Todavía no se podía hablar en aquel momento de cuestión femenina en el moderno sentido de la palabra. Solamente el modo de producción capitalista ha provocado los trastornos sociales que han dado vida a la cuestión femenina moderna; ha hecho pedazos la antigua economía familiar que en el período pre-capitalista garantizaba a las grandes masas del mundo femenino un medio de sustento y un sentido a su vida. Parecería insensato aplicar a la actividad desarrollada por las mujeres en la antigua economía doméstica aquellos conceptos negativos de miseria y de angustia que caracterizan la actividad de las mujeres de nuestros días. Mientras subsistió la antigua forma familiar, la mujer encontró en la misma su sentido en la actividad productiva que desarrollaba, y por ello no era consciente de que estaba privada de todos los derechos sociales, a pesar de que el desarrollo de su individualidad estaba fuertemente limitado.

Continuar leyendo Sólo con la mujer proletaria triunfará el socialismo

¡Por la liberación de la Mujer!

Clara Zetkin
Pronunciado: Ante el Congreso Obrero Internacional de Paris, el 19 de julio de 1889.[1]
Marxist.org

El Chasque 128
8/03/2024

(Ciudadana Zetkin, diputada de las trabajadores en Berlín, asume bajo el aplauso ardoroso la palabra sobre la cuestión de las mujeres trabajadores. Ella aclara que no quería dar parte de ningún informe sobre la situación de las trabajadoras, porque este es el mismo que el de los hombres trabajadores. Pero en acuerdo con sus comitentes enfoncará la cuestión de la mujer trabajadora desde un punto de vista básico. Sería absolutamente necesario que se pronunciara sin rodeos un congreso internacional de trabajadores, en el que se tratara las cuestiones principales, porque sobre esa cuestión no domina ninguna claridad).

No es de extrañar – expone la conferenciante – que los elementos reaccionarios tienen una concepción reaccionaria del trabajo de la mujer. Pero es en el grado inesperado mas alto que también se encuentra una concepción equivocada la situación socialista, en la que se exige la abolición del trabajo de la mujer. La cuestión de la emancipación de la mujer, esto es, en última instancia la cuestión del trabajo de la mujer, es una cuestión económica, y con derecho se espera por parte de los socialistas una elevada comprensión de cuestiones económicas como estas, la cual se manifiesta en la justa demanda alegada.

Continuar leyendo ¡Por la liberación de la Mujer!