LA OTRA CARA DE LA POLÍTICA

14 de marzo de 2020

El Uruguay confirma la teoría de ser el único pueblo de la especie humana, capaz de tropezar dos veces con la misma piedra.

En general las diferentes especies que habitan el planeta tienen incorporado en su ADN el aprendizaje (producto de la evolución de miles de años) de aquellos aspectos que ponen en peligro su supervivencia. La naturaleza los dotó de componentes necesarios para tal cometido. Sin embargo, la especie humana es la única que nace sin atributos físicos integrados (colmillos, garras, etc.) salvo un cerebro capaz de evolucionar a los niveles que hoy conocemos y que le permitió adaptarse y llegar (por ahora) hasta aquí.

Científicos, antropólogos, historiadores, sociólogos de distintas universidades del mundo, vienen analizando el comportamiento de los uruguayos a la predisposición al sufrimiento y la autoflagelación. Algunas teorías establecen la hipótesis da la existencia de ciertos resabios culturales religiosos que persisten profundamente  y que de alguna manera se han incorporado en su ADN. No se sabe si esa predisposición se relaciona a pecados sociales cometidos en determinados momentos de su evolución como sociedad, léase el período artiguista con ideas revolucionarias para la época o más acá en la historia, el período batllista con las ideas radicales en el terreno social y cultural. Como sabemos, ambos ejemplos tuvieron su respuesta contraria. Algo así como que los uruguayos necesitan volver al sufrimiento y tener un período de autoflagelación para recuperar la memoria colectiva y ser felices. Para ser conscientes de la felicidad (opinan algunos marxistas en la materia) es determinante conocer la tragedia y la tristeza.

Otro grupo señala que se debe al espacio que ocupan geográficamente. La falta de grandes catástrofes naturales propias y las bondades del clima y su tierra fértil hace necesario fabricarse problemas para entender que pueden superarlos.

Expertos neurólogos se inclinan por la teoría que establece la existencia de fallas en el sistema neuronal (hasta ahora no comprobado) que deriva en una pérdida de memoria.  Como resetear un celular o computadora para volver a empezar de cero.

Sea lo que sea, es cierto que los uruguayos vienen tropezando con la misma piedra desde los tiempos de Artigas.  Esa piedra fue la que impulsó la historia negra sobre el artiguismo y barrió con el Reglamento de Tierras de 1815 y las Instrucciones del año XIII.

Ni hablemos del período batllista que tuvo grandes antagonistas, el herrerismo y los riveristas de Manini Ríos, que en alianza, se autodenominaron “evolucionistas”. Fuerza conservadora y ultra católica con fuerte asiento en los sectores terratenientes; lo cual nos lleva al concepto de campaña electoral de su bisnieto Luis Lacalle Pou en el SXXI: “evolucionar”. Pura coincidencia o la piedra es la misma.

No es casualidad que Guido Manini Ríos reivindique o haga mención al “Abrazo del Monzón”. Hecho histórico que remite cuando Lavalleja apresa a Rivera por militar en las fuerzas brasileras, y para evitar que lo ejecutaran por traidor, le dio la oportunidad de sumarse a la cruzada libertadora de los “33 Orientales”. 

Guido Manini Ríos probablemente pretendió trasladar el mismo significado que tuvo esa alianza en el pasado y sentir que se sumó a las fuerzas del herrerismo para iniciar una cruzada libertadora contra cuanto homosexual, trans, lesbiana y el derecho a la mujer a realizarse aborto legal, responsables desde tiempos inmemoriales (somos 3 millones hace mucho) de la baja natalidad que tiene Uruguay. Afirmar esto es más o menos creer que Eva nació de la costilla de Adán.  Manini, fiel a esa creencia, propone un estímulo económico para que la mujer se dedique a fabricar y cuidar niños para la patria. Dicho de paso, oculta pensamientos pecaminosos del General retirado (según los preceptos de la Iglesia Católica) ya que pagarle a una mujer para que tenga sexo se le denomina prostitución. Esos niños no serían fruto del amor familiar, por el contrario, serían amor al dinero, una simple mercancía más.

Imaginemos por un segundo, cuando tu hijo te pregunte si vino al mundo por amor, porque querías sentir y amar a otro y le digas la verdad: -No hijo mío, tu llegaste al mundo porque pagaban “X” cantidad de dinero. Una flagrante contradicción de Cabildo Abierto al valor que le da a la familia en el rescate de la nación.

Tuvimos un gran tropezón que transitó por una dictadura feroz y cuatro gobiernos más de los PPTT para que los uruguayos decidiéramos conocer otra forma de vivir.

En 15 años de gobiernos frenteamplistas se construyó:

Sistema Integrado de Salud que abarca a toda la población del país por ser un derecho. El Fondo Nacional de Recursos, que en forma gratuita, permite a miles el acceso a medicamentos de alto precio y tratamientos de avanzada.  Ni hablemos del nivel actual de la Salud Pública y el CUDIM.

El Plan Ceibal y la fibra óptica en casi el 100% de hogares.

Se recibió un Uruguay con casi un 40% de pobreza y 5% de indigencia. Lo devuelve con 8,1% de pobreza, 0,1% de indigencia y el ingreso per cápita más alto de América Latina y el Caribe. Encabeza, junto a Costa Rica, la lista de países con democracia plena en América Latina y el Caribe. El Frente Amplio recibió un Uruguay con 22% de desempleo y lo devuelve con 8,5% de desempleo; pese a la crisis. 13 proyectos de participación público privada (PPP) en Ferrocarril Central, infraestructura vial y nuevos CAIF, todo lo que suma una inversión de 1.900 millones de dólares. La inversión privada más grande de la historia de Uruguay. UPM generará 6.000 puestos de trabajo para su construcción y 10.000 más directos e indirectos cuando funcione a pleno. Uruguay que exportaba a 60 naciones. Ahora lo hace a un mercado de 165 países. Recibió un Uruguay con salarios docentes sumergidos y los incrementó en términos reales en 90%. Redujo en 30% los accidentes laborales y aumentó en 60% la cantidad de cotizantes a la seguridad social. Redujo la mortalidad infantil de 13,2 cada 1.000 nacidos vivos a 6,8 y una mortalidad materna de 0 en 2019. Se sacó a los trabajadores rurales y empleadas domésticas de la explotación laboral a que les sometieron durante siglos. El Frente Amplio recibió un Uruguay con una deuda pública equivalente al 101% del PIB. Ahora lo devuelve tras reducir ese porcentaje al 64,54%, y si consideramos la deuda neta (descontando los activos del BCU), el porcentaje con respecto al PIB es de 32,45%.

Visto esto y más, es que los uruguayos decidieron que era demasiado tiempo de bonanza y que era hora de retornar a un período de autocastigo, y como las lloronas de los entierros mexicanos, volver a llorar por lo perdido.  A 10 días de gobierno de la derecha ya nos obligaron a poner cara de preocupación y amargura. Tarifazo, aumento del IVA y disparada del dólar es igual a inflación y pérdida de compra de salarios y jubilaciones. El gobierno actual hizo todo lo contrario a las promesas de campaña y esto recién empieza. Si aplicamos una fórmula matemática para proyectar cuantas medidas de derecha y que gozaremos en el sufrimiento, daría lo siguiente: 5 años equivale a 1825 días. Si cada 10 días nos dan 3 noticias dolorosas tendríamos el siguiente resultado: 1825 es a X / 10 es a 3, por lo tanto 3 x 1825 es igual a 5475 que dividido entre 10 da 547.5.

El otro aspecto que queremos abordar se refiere a los uruguayos que buscan mitigar o auto convencerse para transitar el período de expiación refugiándose en el concepto de la “alternancia democrática”. Con ella todo se justifica. Es lo más grande que le puede suceder a una Democracia, sin importar si se retrocede. Por ejemplo, Hitler llegó al poder luego de elecciones democráticas en Alemania.  Judíos y millones de personas están encantados con la alternancia. Podríamos seguir con ejemplos pero creemos que es más productivo para garantizar ese componente que permite favorecer la Democracia, elevar un proyecto de Ley para modificar la Constitución e incorporar la norma que impida que un Gobierno pueda repetir si es del mismo signo.  De esa forma y en la misma línea económica del actual Gobierno de derecha, que pretende ahorrar 900 millones de dólares en un año, estaríamos ahorrando en las elecciones nacionales.

Todos los uruguayos sabríamos cuando tendremos un período de mierda y cuando no. Permitiría organizarnos diferente, ahorrar en los 5 años de bonanza para poder soportar los otros. Y así con otros temas. Pero lo más importante a valorar, es que tendremos una Democracia Republicana Alternada. Un gran aporte para la humanidad.  

Es así que recomendamos la siguiente precaución para no tropezar con la misma piedra o mejor dicho no enamorarnos de la piedra: Cuando la derecha nos dice “votá el cambio” o “no vamos aumentar las tarifas” se debe hacer y creer todo lo contrario. 

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